El método SMART es un esquema que ayuda a los negocios a conseguir establecer unas metas adecuadas para fomentar la presencia online de su compañía.
¿Por qué es necesario?
Las redes sociales se han convertido en una poderosa herramienta que, bien gestionada, permite a las empresas maximizar sus beneficios y generar nuevas oportunidades de negocio entre un público más amplio. Para que esa gestión sea efectiva es determinante que se establezcan unos objetivos que permitan crear un contenido acorde, establecer los canales en los que se va a distribuir y fijar el esfuerzo (tiempo/dinero) que debemos ocupar en cada acción.
Los objetivos en las redes deben contribuir siempre a los planes generales de la empresa y estar alineados con la imagen de la compañía. Por ello, no es una tarea sencilla, tomárselo a la ligera puede suponer una gran pérdida de tiempo y, más importante, de oportunidades que generen un impacto positivo en tu negocio.
Comencemos estableciendo la diferencia entre una meta y un objetivo. El objetivo representa lo que las redes sociales lograrán para tu negocio (conversiones, percepción de marca, experiencia de cliente…) y las metas son cómo y cuándo se obtendrá.
Método SMART para redes sociales
El esquema de meta SMART se basa en el acrónimo inglés formado por las siglas provenientes de los vocablos: Specific (Específico), Measurable (Medible), Attainable (Alcanzable), Relevant (Relevante) y Time Based (Puntual).
Una buena gestión de redes debe tener en cuenta estos parámetros para establecer las metas correctas y alcanzar los objetivos marcados en tu plan de comunicación y marketing, veamos cómo podemos llevarlo a cabo.
SMART paso a paso
Específico (S)
Si planteas metas vagas, será difícil que puedas llegar a lograrlas. Incrementar tus seguidores en redes sociales es algo muy genérico, sin embargo aumentar 50 seguidores en Facebook es algo mucho más específico y fácilmente medible. Es necesario que las metas que fijes sean claras, no sean abiertas a la interpretación, ya que eso podría dificultar el análisis posterior.
Medible (M)
Si no es posible medir lo que pretendes alcanzar significa que tu meta está dificultando tu estrategia de marketing. Tienes que ser capaz de poder identificar tu progreso para saber si estás siendo efectivo o tienes que corregir tu forma de trabajo. La medición te permitirá saber cuándo fallas, pero también te mostrará las claves de tu éxito para poder explotarlas en un futuro.
Alcanzable (A)
Para este punto es importante hacer una labor de investigación previa, debes saber cómo funcionan las redes sociales y cómo se mueven compañías similares en internet. Es fundamental establecer metas que supongan un desafío para tu equipo, pero que no sean imposibles, ya que eso será frustrante a la larga.
Por ello, no puedes aspirar a tener 500 retweets si tus seguidores son 200, tendrás que generar primero un público en tu red y buscar metas alcanzables a corto plazo para poder llegar a ser más codicioso a la larga. No empieces la casa por el tejado o tu presencia online se desplomará rápidamente.
Relevante (R)
No pienses que porque las redes sociales pueden usarse para temas banales, son poco importantes. Una estrategia correcta puede marcar la diferencia en la proyección de cualquier negocio. Por ello, deja en manos de expertos tus redes sociales y establece metas que impacten positivamente en tu negocio.
Puntual (T)
Comprométete a un plazo de tiempo para alcanzar cada meta. Al estimar una fecha límite sabrás cómo enfocar tus esfuerzos y será más difícil que pierdas el tiempo. Tras el tiempo establecido siempre debes analizar los resultados para poder determinar si tu estrategia está siendo exitosa o tienes que hacer modificaciones.
Ejemplo de meta SMART para un negocio
Incrementar en 100 los seguidores de Instagram durante este mes.
Una vez establezcas esta meta puedes analizar cuáles son las mejores acciones para conseguirla y contribuir a un objetivo más grande: mejorar tu presencia online.
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